Durante el proceso de blanqueamiento se recomienda llevar una dieta blanca. Esto suscita muchas dudas entre los pacientes, así que vamos a resolverlas.
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¿Qué es una dieta blanca?
Es el tipo de alimentación que se recomienda durante los procesos de blanqueamiento dental. Su nombre hace referencia a los alimentos de colores claros.
Está enfocada en el consumo de ingredientes que no contengan colorantes, ácidos o pigmentos fuertes, con el fin de evitar la tinción de los dientes.
Durante el blanqueamiento, el esmalte se encuentra más poroso y, por lo tanto, susceptible de absorber dichas tinciones. Esto puede comprometer el buen resultado del tratamiento, por eso recomendamos mantener esta dieta.
Para que ceñirse al consumo de estos alimentos sea más sencillo, te proporcionamos unos útiles consejos:
- Procura comer en casa para poder controlar los ingredientes de cada plato.
- Prepara tus comidas con antelación para evitar tentaciones.
- Si no puedes vivir sin café, y es imposible sustituirlo por otra bebida, tómalo con pajita y enjuágate con agua tras su consumo.
- Evita salsas, especias y condimentos, opta por hierbas para saborizar tus comidas.
Qué evitar durante una dieta blanca
Los alimentos que listamos a continuación manchan el esmalte habitualmente, pero en el caso del blanqueamiento, sus efectos pueden ser más notorios. Conviene que evites el consumo de:
- Bebidas como café, té, vino tinto.
- Bebidas con gas.
- Cítricos (limón, naranja, pomelo…) y frutos rojos (frambuesas, fresas, arándanos…).
- Salsas con colorantes como la mostaza, la soja o el ketchup.
- Vegetales con alto contenido de pigmento como remolacha, pimiento o tomate.
- Especias como curry y pimentón.
Qué se puede comer
Algunos “alimentos blancos” que sí puedes consumir son:
- Lácteos como leche, yogur, queso blanco, etc.
- Pescado blanco.
- Carne magra.
- Legumbres claras como garbanzos o judías blancas.
- Frutas poco pigmentadas como manzana, plátano o pera.
- Huevos.
- Vegetales claros (evitando espinacas, alcachofas y calabacines).
- Pasta (sin salsas), patatas y arroz blanco.
- Agua, por supuesto.
Un ejemplo de menú con dieta blanca podría ser:
- Desayuno: batido de leche con plátano
- Comida: arroz blanco con pollo y zanahoria
- Merienda o media mañana: yogur natural con pera
- Cena: pescado a la plancha con patata cocida
Cuidados y consideraciones
Existen otras sustancias que deben evitarse en todo momento como el tabaco. Huelga decir que la higiene bucodental debe ser exhaustiva, cepillando después de cada comida y utilizando el hilo dental.
Para que los resultados del blanqueamiento se mantengan en el tiempo, es importante seguir estas recomendaciones.
No es necesario alargar la dieta blanca indefinidamente, tras el blanqueamiento es suficiente con mantenerla unos cinco o siete días más. Sin embargo, debes tener en cuenta que fumar y consumir alimentos muy pigmentados, de manera constante, irá oscureciendo o amarilleando poco a poco tu sonrisa.